¿Ya sabes qué estudiar? Solicita información de carreras y universidades aquí
Desde el momento que das tus primeros pasos en la vida universitaria, y a lo largo de toda tu vida profesional, las referencias personales y laborales serán importantes para abrirte muchas puertas. Aprende a identificar una buena carta de recomendación, qué debe incluir y quién debe escribirla para ti. También presta atención a los consejos para redactar este tipo de cartas en distintos contextos.
Se refiere a un documento escrito por una tercera persona u organización, donde se reconocen tus cualidades y competencias con la intención de recomendarte para algún beneficio. Por ejemplo, ingresar a una universidad, obtener una beca o conseguir cierto puesto de trabajo.
Las cartas de recomendación son una referencia personal, laboral o académica. Por lo tanto, forman parte de los requisitos al momento de solicitar una beca de estudios, aplicar a un programa de posgrado o solicitar un empleo. En la redacción de este documento, se busca destacar las habilidades y competencias académicas o laborales de una persona. Al mismo tiempo que, realza sus cualidades humanas y sociales.
Una carta de recomendación no es un documento que puedas confiarle a cualquier persona. En primer lugar, porque debe ser capaz de emitir una opinión objetiva, además de creíble. Y en segunda instancia, porque es necesario que sean personas relacionadas a tu entorno académico y laboral.
Por lo tanto, las mejores opciones son docentes, o profesores, cuando se trata de una carta para entrar a la universidad, ganar una beca o ingresar a un programa de posgrado. Y empleadores, supervisores o colegas, si quieres utilizar la carta en tu aplicación por un nuevo trabajo.
Ten presente que, lo más aconsejable es pedir la recomendación a alguien con quien mantengas una buena relación, pero que pueda fijar una posición neutral sobre ti. Así evitas que las percepciones personales y emocionales, interfieran con una descripción real de tu perfil profesional o académico.
Dado que las cartas de recomendación no tienen un formato obligatorio en todos los casos, puede resultar un poco intimidante redactar este documento sin saber bien por dónde comenzar. Afortunadamente, tienes la oportunidad de tomar como guía la estructura de este tipo de documentos, asegurándote de que no falta nada, antes de entregar tu carta.
Ya que se trata de una carta formal, es indispensable que incluya un encabezado con toda la información pertinente para contextualizar la carta. Te en cuenta que, si el documento se escribe en nombre de alguna empresa o institución, lo más conveniente es utilizar el formato corporativo que corresponde a esa organización.
Generalmente, los elementos del encabezado son:
Desde el primer párrafo, se debe indicar el nombre del recomendador y del recomendado. Para identificar a la persona que escribe la carta se utiliza su nombre completo y DNI, mientras se hace referencia al cargo que ocupa y la relación que tiene con la persona a la que recomienda.
Por supuesto, también se deja en claro el nombre y DNI de la persona recomendada. Al finalizar la carta, es importante que el recomendador incluya sus datos de contacto (número telefónico y correo electrónico). Así es posible ubicarlo después para pedir más información, o confirmar la veracidad de la carta.
Corresponde al primer párrafo de la carta, después de indicar los nombres de las dos personas involucradas. En este espacio se define el tiempo que ha durado la relación, ya sea empleado – empleador, estudiante – profesor, o entre colegas de trabajo. También es oportuno aclarar en qué términos y contexto se desarrolló la relación.
Por ejemplo, si fueron prácticas profesionales o un empleo completo; si fue su profesor de una o más asignatura; asesor de tesis; supervisor en una investigación, etc.
Corresponde a la sección más extensa de la carta, donde el autor explica por qué recomienda a esta persona. Se describen las cualidades y aptitudes positivas del recomendado, procurando ser siempre sincero y no exagerar, puesto que la carta pierde credibilidad y profesionalidad. Cabe destacar que este documento debe tener una extensión máxima de 1 o 2 cuartillas.
Lo adecuado es hacer referencia solo a los aspectos positivos relacionados con la beca, el programa de estudios o el empleo al que busca ingresar el recomendado. De igual manera, es oportuno exponer las funciones que desempeñaba y los logros alcanzados, sean académicos o profesionales.
Las aptitudes y cualidades que se suelen destacar son liderazgo, trabajo en equipo, rendimiento académico, interés por la investigación, capacidad de adaptación, responsabilidad, puntualidad, entre otras. Pero siempre es bueno usar la creatividad para describir el perfil de forma más atractiva.
En el último párrafo de la carta, quien escribe concluye lo expuesto anteriormente con una frase corta de recomendación. Por ejemplo:
Además, aprovecha de despedirse y expresar su disponibilidad para ser contactado y proporcionar más información, de ser necesario.
Una buena carta de recomendación puede ser necesaria para tu ingreso a una universidad, tanto para iniciar estudios de pregrado, como para ser aceptado en algún programa especial de investigación. Por lo tanto, debe ser escrita por un profesor titular o asesor (con el que hayas pasado mucho tiempo), el coordinador o director de tu colegio anterior, un orientador o encargado de alguna actividad extracurricular importante.
Probablemente, si eres un estudiante joven no tienes un gran portafolio de logros que destacar en tu carta de recomendación. En ese caso, estos documentos suelen centrarse en describir tus aptitudes académicas y explicar por qué eres un buen estudiante.
Aunque también hay espacio para hablar sobre características personales, que pueden ser de interés para la universidad o para los reclutadores. Así como de experiencias y formación adquiridas a través de actividades extracurriculares. Por ejemplo, voluntariado, deportes, cursos, etc.
Las instituciones educativas, especialmente las universidades extranjeras, por lo general establecen una serie de parámetros que debe cumplir la carta para que pueda contar como válida. Se refiere al formato, extensión del texto, encabezado, datos de contacto, idioma, entre otros.
Recuerda revisar muy bien las normas de la universidad a la que quieres aplicar, para no pasar ninguna por alto. Además, te en cuenta que quizás debas traducir tu carta al inglés, o a otro idioma, si vas a enviarla al extranjero.
En la mayoría de las universidades peruanas, la carta de recomendación es un requisito importante para tu admisión en un programa de posgrado (maestría o doctorado). El objetivo principal es poder evaluar la imagen que tus superiores tienen de ti, y tu actitud frente al trabajo.
Esta recomendación la puede escribir un profesor o tutor de tesis, lo mismo que un empleador o jefe. La decisión la tomas según tu criterio: ¿Qué puede ayudarte para ser más atractivo como candidato? ¿Tus logros académicos o tu logros profesionales?
La carta de recomendación laboral se suele entregar junto con tu currículum vitae, y resulta muy útil para que los reclutadores puedan comprobar la autenticidad de muchos de los datos que allí presentas. No siempre son necesarias, pero entregar una buena carta de recomendación puede hacerte destacar sobre otros candidatos.
Lo más recomendable es suprimir cualquier información no relevante sobre tu desempeño laboral. Ya que, la carta debe contribuir a construir una imagen global de tu perfil profesional. Por supuesto, debe ser redactada por un jefe, director, supervisor o coordinador de departamento, quien haya trabajado muy cerca de ti.
Existen algunos términos como “regular”, “medianamente”, “pasable”, “moderadamente” y otros; que dan una idea imprecisa sobre tu valor como empleado. Conviene evitarlos a toda costa, y concentrarse en expresiones más positivas. Por ejemplo:
Junto con la carta de motivación para beca, tu carta de recomendación será de vital importancia al presentar tu solicitud para este tipo de beneficio. Siempre hay muchos candidatos para optar por una beca, estos documentos cumplen la finalidad de darte a conocer frente al comité de selección y responder a la pregunta ¿Por qué te mereces la beca?
No hay reglas estrictas sobre quién debe escribir tu carta de recomendación para beca, siempre y cuando sea una persona que te conozca bien. Sin embargo, algunas opciones son empleadores, compañeros de trabajo, profesores, tutores de investigación, coordinadores de voluntariado y directores de ONGs (donde hayas participado).
Lo más importante es asegurarte que el autor de tu carta defina los principales rasgos de tu carácter, es decir, tu forma de pensar y actuar. Es necesario darle igual importancia a tus méritos académicos y profesionales, como a tus valores y principios.
Aprovecha la carta de recomendación para exponer cuáles son tus proyectos de carrera, qué quieres estudiar, en qué deseas especializarte, cómo planeas contribuir con la sociedad, dónde quieres trabajar, etc. Todo esto a través de las palabras y la perspectiva del recomendador.
Por supuesto, no se puede dejar de mencionar tu participación en algún proyecto social, o para tu comunidad. Lo que si debes evitar son las exageraciones o mentiras, porque el reclutador podría querer confirmar lo que se ha contado en la carta de recomendación.